Llevaba unos años queriendo ir a la convención Sell-a-Bration y en 2015 me quedé a las puertas. Este año no podía fallar, me lo había prometido a mi mismo. Charo y yo pensamos acudir juntos y celebrar nuestras Bodas de Plata allí ya que, justo este 2016, hace 25 años que hicimos nuestra luna de miel en Miami, Orlando y Cancún. Una coincidencia maravillosa. Pero… Un pequeño accidente de Charo estas Navidades truncó nuestra ilusión de ir juntos y como consecuencia me empujó a que fuera solo.
Sell-a-Bration es la mayor convención de agentes inmobiliarios (realtors) de EEUU, calculo que también es la mayor del mundo. Está organizada por la NAR (National Association of Realtors) y este año se celebraba en Orlando. Son varios días de formación, networking, de compartir experiencias con compañeros de profesión y en la que los mejores agentes americanos dan sus ponencias compartiendo sus conocimientos. Un buen motivo para cruzar el charco.
Pero no vayamos tan deprisa. Antes de la convención estuvimos en Miami unos tres días en los que aprendí más, si cabe, que en la propia convención. Fue impresionante ver la sede de la asociación de los Realtor de Miami, un edificio gigantesco con más de 40.000 asociados ¡Sólo en Miami! Para que os hagáis una idea, en toda España solo somos unos 4.500 Apis colegiados y solo en Miami tienen 40.000 asociados ¡Increíble!
Nos recibieron y nos mostraron sus estadísticas y sus formas de trabajar. Lo tienen todo computado y, como sabemos, la información es oro. También visitamos una agencia inmobiliaria que pertenece a la prestigiosa Christie’s, conocida por su galería de subastas de arte, pues también tiene una división inmobiliaria. En esta agencia trabajan más de 200 agentes y es muy enriquecedor ver su estructura interna además de que sus Brokers te hagan de cicerones.
Más tarde visitamos dos mega promociones inmobiliarias de apartamentos en la bahía de Miami. Las dos promociones más importantes que se están comercializando en estos momentos en la ciudad. Espectacular la puesta en escena y el marketing de ambas promociones de centenares de millones de dólares. En la segunda de ellas tuvimos la ocasión de entablar relaciones profesionales con muchos agentes de la ciudad que vinieron a visitarnos y con los que charlamos durante unas horas.
La verdad es que no todo fue estrictamente profesional en Miami, también nos dio tiempo de visitar Miami Beach, hacer una excursión en barco por la bahía recorriendo todas las fabulosas mansiones de los famosos y con el autobús pudimos ver el Down Town y los barrios residenciales de lujo de su alrededor.
Ahora tocaba volar a Orlando, aunque en el trayecto al hotel tuvimos algún percance con las maletas, todo salió bien y llegamos a un excelente resort en el interior de Universal Studios donde se iba a celebrar la propia convención. Un hotel estupendo, rodeado de una vegetación tropical paradisíaca que estaba unido por barco-bus con enormes zonas de ocio y restauración.
El primer día, Dale Carlton, nos dio un curso de técnicas de negociación Win-Win que duró toda una jornada ¡Excelente!
Siguieron dos días de ponencias y testimonios en las que los agentes americanos de éxito compartían con todos nosotros sus técnicas de trabajo y sus experiencias. Fue el primer año en el que los españoles prepararon una de las ponencias dirigida por Fernando Garcia Erviti. Gracias a él y a UCI, los españoles vamos pegando muy fuerte en el sector inmobiliario a nivel internacional. Impresiona ver la generosidad con la que todos comparten sus conocimientos.
En un escapadita, algunos visitamos las instalaciones de la NASA en Cabo Cañaberal mientras otros se quedaron disfrutando de las atracciones del parque. Todo el viaje ha sido una extraordinaria experiencia que ha combinado perfectamente la parte lúdica con la profesional, cada una de las excursiones, cada una de las ponencias sería merecedora de un extenso artículo.
¿Lo mejor que me he traído? Vuelvo con la maleta llena de ideas, pero la relación con los compañeros de toda España que comparten la misma pasión por la profesión, con las mismas inquietudes y las misma ilusiones sin duda son lo mejor.
Tengo que decir que los agentes inmobiliarios españoles que he conocido en el viaje me han sorprendido a mí y a los americanos, por su calidad profesional y personal.
¡Volveremos!
