Has tomado una decisión y llegó el momento de vender tu vivienda, probablemente te hayas fijado un plazo y un precio, tal vez hayas decidido que quieres hacerlo a través de una inmobiliaria o piensas gestionarlo tú mismo.
Sin importar la forma en que hayas decidido hacerlo, es importante que prepares tu casa para la venta, así podrás obtener un mejor precio y tendrás un comprador más rápidamente.
La primera impresión es importante, no solamente cuando conoces a una persona, también cuando entras a un sitio. Si no logras impresionar a un posible comprador en esa toma de contacto que supone la primera visita a tu casa, será muy difícil que quiera volver a verla y mucho menos que haga una oferta por ella.
En Inmobiliaria Piquer llevamos 25 años ayudando a nuestros clientes a vender sus viviendas y sabemos lo que busca un comprador, por eso queremos darte unos consejos para que logres tu objetivo rápidamente.
1. Despéjala y despersonalízala. Es muy importante que quites todos tus elementos personales, tus colecciones o los recuerdos de los viajes pueden distraer la atención de los compradores y hacer que se fijen en esos detalles y no en las características de la vivienda.
Guarda también tus fotos familiares y deja para tu próxima vivienda las banderas y posters de tu equipo de fútbol favorito, así como cualquier elemento político o religioso. Los que vayan a ver tu casa pueden tener otras ideas y sentir una sensación de rechazo solamente por lo que hay colgado en las paredes, pues van buscando crear su propio hogar, así que debemos mostrarle solamente lo que le interesa: La vivienda.
2. Repárala y píntala. Si la casa tiene humedades, grifos que gotean, puertas que no encajan bien, silicona manchada en la ducha o el lavabo o cualquier pequeño detalle que has ido dejando pasar, repararlo antes de venderla es una inversión que ayudará a conseguir una venta más rápida y a un precio mayor.
Si además la pintas en blanco dará la sensación de ser más nueva, desaparecerán esas marcas que quedan al mover los muebles o las manchas que dejan niños y mascotas. Además los colores claros le darán la sensación de amplitud y tendrá más claridad, dos factores importantes que siempre buscan los compradores.
Si dejas todos esos detalles para el próximo dueño, es muy probable que recibas ofertas más bajas por tu vivienda, porque dará la sensación de ser una casa descuidada a la que tendrán que hacerle reparaciones incluso antes de mudarse y esto depreciará su valor.
3. Moderniza. No estamos hablando de hacer una reforma integral de la casa, a veces un cambio sencillo hace la diferencia. Por ejemplo en las cocinas o armarios muy antiguos, puedes poner unos tiradores diferentes, poner nuevos filtros en el lavabo y el fregadero cuando están llenos de verdín o quitar las lámparas demasiado llamativas y poner un plafón sencillo.
4. Mantenla limpia y ordenada. Especialmente en el caso de ponerla a la venta mientras sigues viviendo en ella, es importante que la prepares cada vez que vas a recibir una visita, trata de no tener platos sucios en el fregadero o churretones de jabón en la bañera, intenta que los juguetes de los niños no estén tirados por todo el salón, que los muebles no tengan una capa de polvo donde puedas escribir una nota o que el suelo esté manchado de salpicaduras.
5. Los olores. El olor a comida, un baño recién usado, las mascotas o el tabaco no te van a ayudar a vender la casa fácilmente. Ventila las habitaciones un rato antes de la visita y usa ambientadores con aromas suaves.
6. Iluminación. Puede que te guste pasarte el día en casa con las persianas cerradas, pero si tienes la visita de un posible comprador debes abrirlas todas. Cuando le preguntamos a un comprador cuáles son las características más importantes que quiere en su próxima vivienda, una de ellas suele ser «que tenga mucha luz».
Si debes mostrarla en la noche, ten todas las luces encendidas y comprueba que todas las bombillas funcionen.
7. Temperatura. Nada peor que entrar en una casa en pleno verano y tener que salir a los pocos minutos porque el calor es agobiante, o tiritar de frío en invierno. Si vas a tener la visita de un comprador, trata de que la temperatura sea agradable encendiendo la calefacción o el aire acondicionado al menos media hora antes de la visita.
Con estos consejos básicos tendrás más posibilidades de vender tu vivienda al mejor precio y en el menor tiempo posible, aunque esto es solamente el principio.
Más adelante hablaremos sobre la importancia de tener unas buenas fotos, o los papeles que debes preparar para no tener sorpresas cuando llegues a la notaría.
